He dedicado esta publicación a mis estudiantes de ayer, hoy y mañana, pues en sus manos está el futuro de la Patria
El pasado 21 de enero salió al público, bajo el auspicio del Instituto de Estudios políticos e Internacionales (IEPI), mi libro:¿Hacia dónde vamos? Crítica a la teoría pura de la política criolla.
Debo indicar, antes que nada, que sin la desinteresada colaboración del amigo Luis Eduardo Henao, afanoso y dedicado gestor de la Editorial Cultural Portobelo, este trabajo no hubiese podido alcanzar el rigor editorial que requería.
He dedicado esta publicación a mis estudiantes de ayer, hoy y mañana, pues en sus manos está el futuro de la Patria. Se trata de las reflexiones que a lo largo de varias décadas he venido compartiendo en charlas, conferencias, seminarios, debates artículos de opinión, en aras de un mejor país para todos. Las mismas han sido compiladas con criterios temáticos, en once capítulos repartidos a lo largo de las 220 páginas del libro, cuyos títulos me permito compartir aquí:
- Capítulo I: Política y Corrupción
- Capítulo II: Política y Politiquería
- Capítulo III: Política y Gobierno
- Capítulo IV: Política y Justicia
- Capítulo V: Política y Participación ciudadana
- Capítulo VI: Política y Democracia
- Capítulo VII: Política y Valores
- Capítulo VIII: Política e Información
- Capítulo IX: Política y Derechos Humanos
- Capítulo X: Política y Constitución
- Capítulo XI: Política y Constituyente
Panamá es un país pequeño, con un potencial único a nivel mundial y que cumple un papel fundamental en el concierto de las naciones, al ser la llave de paso interoceánico. Nadie más tiene esta oportunidad que nos da la ventaja de ser un país esencial para el mundo.
De ahí entonces, una razón más para reaccionar cuanto antes y no seguir permitiendo que una minoría de corruptores y corruptos continúen llevándose “las mieles de nuestros panales”. La hora de despertar y actuar ha sonado y no podemos llegar más tarde de lo permitido.
La respuesta a la interrogante ¿Hacia dónde vamos?, tiene que ser colectiva. Tiene que ser de todos los ciudadanos que con dignidad, solidaridad y seguridad, rescatemos a través un proceso constituyente, nuestra población, nuestro país. para ponerlo en el sitial que se merece con creces.
Una respuesta a «¿Hacia dónde vamos?»
Felicitaciones Miguel Antonio.
Los jóvenes de ahora necesitan despertar e ilustrarse para que analizen y tengan criterios propios. Los conocimientos adquiridos se transforman en experiencias, quedando un capital que no es material y nadie puede comprar todos estos conocimientos. Sólo si la persona lo permite.