Por: Miguel Antonio Bernal – Catedrático universitario.
En aras de contribuir a un mejor conocimiento del proceso constituyente, damos inicio a esta serie: ¿Qué es poder constituyente? ¿cuál es su relación con el poder público?
El creador de la expresión “poder constituyente” fue el francés Enmanuel Sieyes [1] para quien tal poder es propiedad de la “nación” entendida como “toda la población del Estado”, salvo [en ese tiempo] el sector privilegiado, o sea, la nobleza[2].
De ese poder constituyente surge una Constitución, según los términos de una muy famosa explicación de su parte que fue registrada durante la intervención que protagonizó en la Asamblea Nacional de Francia (1789). Allí el abate Sieyes expresó que “una constitución supone ante todo un poder constituyente” y añadió que “el poder constituyente lo puede todo […] De ninguna manera está sometido de antemano a una constitución dada” [3].
Durante la misma sesión citada el señor abate Sieyes dijo que “todos los poderes públicos, sin distinción, emanan de la voluntad general; todos vienen del pueblo, es decir, de la nación. Estos dos términos deben ser sinónimos” [4] más aún, cuando terminó su intervención en la sesión del 21 de julio de 1789, la resumió diciendo que se había tratado de la exposición razonada de los Derechos del Hombre y del Ciudadano que proponía para que sirviera de “guía en la obra de la constitución a la que vamos a consagrarnos” y, acto seguido, pasó a presentar aquella que consideró “la parte más esencial” de su exposición.
De los varios artículos que leyó a continuación el abate Sieyes citamos el que sigue: “Art. 28. Todos los poderes públicos emanan del pueblo, y no tienen otro objeto que el interés del pueblo” [5].
Referencia:
1. Quintero, César. Crítica a la teoría pura del poder constituyente. Cultural Portobelo, 1999.
2. Quintero, César. Idem.
3. De los derechos del hombre y del ciudadano. Leído los días 20 y 21 de julio de 1789, al comité de constitución, por el Sr. Abate Sieyes.
4. De los derechos del hombre y del ciudadano. Idem
5. De los derechos del hombre y del ciudadano. Idem
