Vacunación en Panamá: Alto a la Improvisación
A pesar de que la Presidencia de la República de Panamá había informado, a mediados de diciembre del año pasado, que Panamá estaría entre los primeros países del mundo en recibir la vacuna, contratada con la empresa Pfizer, no fue así: en dicho mes lo hicieron México, Costa Rica y Chile, mientras Brasil recibía vacunas de origen chino, y Argentina, vacunas procedentes de Rusia.
Luego, el primer mandatario, en su discurso a la Nación del 2 de enero, indicó que las recibiríamos en el primer trimestre de 2021.
Más tarde, el 5 de enero, la presión ciudadana exigiendo transparencia en las contrataciones llevó a la Canciller a dar explicaciones y asegurar que la farmacéutica Pfizer se comprometía en una primera fase, a proporcionar 450,000 dosis en 90 días, las cuales llegarían de manera progresiva de acuerdo con el plan de vacunación, para lo cual ya se había dado un abono de 6 millones de dólares, pero que adelantarían 40,000 dosis, entre el 18 y el 25 de enero.
Promesa esta última que no se cumplió: el 20 de enero llegaron a nuestro país, sólo 12,840 dosis, informando la empresa que “habían reducido envíos a Europa y Latinoamérica para aumentar su producción hasta el 15 de febrero de 2021”.
Es evidente que la opacidad caracteriza a este contrato, a pesar de la obligación de transparencia de los funcionarios en lo que se refiere a la gestión pública, escudándose la Canciller, en las cláusulas de confidencialidad del acuerdo.
El programa de vacunación que establecía que en una primera etapa de la primera fase se aplicaría las vacunas al personal de salud que atendía en primera línea a pacientes del covid-19, se realizó, a partir del mismo 20 de enero, inicia de una manera bastante desordenada, incumpliendo con las normas planificadas, inmunizando a algunos que no tenían derecho y excluyendo al personal prioritario de hospitales públicos y privados, los cuales quedaron descontentos con esta irregularidad y, por supuesto, realizaron su protesta a nivel nacional.
Asimismo se desconocen los contratos celebrados con las otras empresas abastecedoras de vacunas, como la AstraZeneca y Johnson & Johnson, las cuales deberían inmunizar para las siguientes fases, a 1,400,000 panameños; así como no se tiene certeza de que el Programa COVAX de la OMS cubriría a 1,100,00 personas más, ante un mercado internacional de vacunas, altamente desigual y especulador.
Por todas estas irregularidades planteadas EXIGIMOS AL GOBIERNO:
- Que se divulguen públicamente los contratos firmados con las empresas proveedoras de vacunas, así como las requisiciones para la compra de los congeladores.
- Que el gobierno haga los reclamos legales pertinentes a la empresa farmacéutica Pfizer, por la entrega incompleta, y que exija el cumplimiento de lo pactado.
- Que se cumplan con las diferentes fases de vacunación programadas y se realicen con toda la transparencia debida, evitando las incomodidades a la población.
- Que se cumpla con el consentimiento libre e informado a la hora de llevar a cabo la vacunación de la población.
- Que el gobierno explore a la mayor brevedad posible, otras posibilidades de abastecimiento de vacunas, seguras (con una eficacia mayor del 70%) y económicas, pues en este momento está en juego la sobrevivencia de la comunidad nacional y la preservación de su salud.
Panamá, 26 de enero de 2021.